La Fundación Mainel apoya en Guatemala desde 2006 el proyecto de Becas para niñas y microcréditos para mujeres. Los microcréditos se conceden a mujeres emprendedoras a través de los llamados «Bancos Comunales».
Estos Bancos están constituidos por mujeres que desean impulsar sus actividades económicas, pero que no cumplen los requisitos que solicitan las entidades bancarias para solicitar un crédito. Por ello se reúnen en grupo y forman los Bancos Comunales, para poder solicitar juntas a FUNDAP, nuestra contraparte local, un microcrédito que permite a cada una de ellas iniciar su labor.
Cada una actúa como garante del resto, su único aval es el compromiso personal de que van a ejecutar la actividad empresarial elegida por cada una de ellas, de manera que les permita mejorar sus ingresos y devolver el microcrédito. Cuando el grupo recibe la financiación correspondiente y cada mujer realiza su inversión, FUNDAP lleva a cabo acciones de seguimiento, asesoría y capacitación continua, lo que estimula tanto el crecimiento individual como colectivo.
El impulso que generan los Bancos para el desarrollo de la actividad empresarial de las mujeres permite que estas se fortalezcan, mejoren su formación, y tengan más opciones para alejar a sus familias de la pobreza.
Generación de cambio
Luisa Macario Xec es integrante del Banco Comunal Generación de Cambio, que está ubicado en el Municipio de San Cristóbal del Departamento de Totonicapán. Luisa regenta un pequeño puesto de comida que prepara ella misma. Tiene dos hijos de los que confiesa sentirse muy orgullosa. Ella misma nos cuenta su experiencia con los Bancos Comunales.
Luisa al frente de su pequeño comercio.
«En mi familia han sido todos comerciantes desde hace varias generaciones, entonces desde pequeña yo acompañaba a mi mamá a vender fruta, comida y aguas, en el lugar denominado “Cuatro Caminos” de Totonicapán. Cuando ya me convertí en adolescente empecé con mi propio negocio con la ayuda que me dio mi mamá; pero vi la necesidad de ampliarlo y empecé a averiguar opciones de crédito. En ese momento se me ocurrió preguntar a una de mis vecinas y casualmente ella estaba organizando un grupo de mujeres, me acerqué a Doña Santos Sabaj, quien era la líder y nos pusimos de acuerdo en contactar a la asesora para que llegara a brindar más información; fue así como convocamos a más señoras interesadas y pudimos conformar el Banco Comunal Angelitas.
Trabajé seis ciclos en dicho Banco Comunal; mi primer crédito lo recibí en noviembre 2011, con un monto inicial de 2.500 quetzales (285 euros), dinero que invertí en venta de refracciones. Por razones personales me retiré por un lapso de seis meses, después de eso reingresé al Banco Comunal Generación de Cambio en el cual me encuentro vigente, estoy trabajando el mismo monto con el que inicié y sigo invirtiendo en el mismo negocio.
En el grupo la asesora nos imparte capacitaciones diversas, las cuales recibimos el día que nos corresponde reunión en la sede del grupo. A veces son prácticas como manualidades, cocina o repostería y otras veces son charlas educativas en relación al crédito, el ahorro, el sobreendeudamiento y también hemos recibido pláticas en relación a la salud y cuidado de la mujer.
Gracias a FUNDAP contamos con el servicio médico gratuito el cual ha sido de mucha ayuda para mi familia, he participado también en capacitaciones por parte del técnico agrícola en donde también nos han capacitado en temas interesantes para tener un mejor manejo del nuestro negocio, y también hemos participado en capacitaciones para líderes en la Labor El Refugio de FUNDAP.
Estoy muy contenta por los avances que hasta el momento he logrado, gracias a Dios y a la oportunidad que me dio FUNDAP con el primer crédito que me otorgó hace ya cinco años y seguimos con la Institución porque ha sido un gran respaldo no solo para mí, sino para que mi negocio crezca y también el de mis compañeras.»
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