Los días 4 y 5 de febrero la Fundación Mainel celebró su congreso anual sobre derechos humanos dedicado en esta edición a la lucha contra la discriminación.
El encuentro sirvió para reflexionar y alentar la defensa de los derechos de todas las personas, y más en un contexto como el actual en el que con la excusa sanitaria muchos derechos y principios democráticos se están viendo vulnerados.
Las actas del congreso ya están disponibles para su descarga en la web derechoshumanos.mainel.org
En la sesión inaugural participaron las personas representantes de todas las instituciones organizadoras y colaboradoras: Jorge Sebastián Lozano, presidente de la Fundación Mainel; Ángeles Solanes Corella, directora académica del congreso y catedrática de Fª del Derecho y Fª Política de la Universitat de València; Francisco Javier Palao, decano de la Facultad de Derecho de la Universitat de València; Raquel Marco Espejo, Diputada 2ª del ICAV; Maite Ibáñez Giménez, Concejala de Cooperación al Desarrollo y Migración de l’Ajuntament de València; y Rosa Pérez Garijo, Consellera de Participación, Transparencia, Cooperación y Calidad Democrática. Generalitat Valenciana.
Buenas prácticas en igualdad
La primera ponencia la realizó Yolanda Gómez Sánchez, catedrática de Derecho Constitucional de la UNED, catedrática Jean Monnet de la Unión Europea y directora del Centro de Estudios Políticos y Constitucionales. En su intervención sobre las buenas prácticas en igualdad destacó que las mujeres han sido el verdadero sujeto de la lucha por la igualdad, que se ha convertido en un elemento estructural de la democracia en los estados actuales.
En palabras de Yolanda Gómez, la incorporación de España a la Unión Europea fue determinante en el avance en igualdad. Sin embargo, la Constitución Española está redactada en clave masculina. Se refiere a las mujeres siempre en su condición de madre, de unidad familiar, de estado civil, aunque establece unos parámetros donde poder anclar los temas de igualdad. Aún así, no recoge una mención específica a la igualdad entre hombres y mujeres, lo que sí queda recogido en la legislación europea. Y también el derecho internacional es determinante.
Antes que referirse a “buenas prácticas”, Yolanda Gómez prefirió hablar de las “mejores prácticas” que se puedan aplicar en cada caso; a las actuaciones que favorezcan la eficacia de las normas o complementen las mismas (perspectiva de género, recursos humanos, conciliación, reducir la brecha de género…). Además, las ”mejores prácticas” no requieren base legal en todos los casos, pero en materia de igualdad suelen tenerla, como las medidas de formación y sensibilización, el uso del lenguaje inclusivo y no sexista o los buzones de sugerencias, entre otros.
La jurisprudencia del Tribunal Europeo de Derechos Humanos
En la segunda mesa participó María Elósegui, magistrada del Tribunal Europeo de Derechos Humanos, junto a Susana Sanz y Luis Jimena, jueces ad-hoc de dicho Tribunal. Entre los tres ofrecieron una perspectiva del trabajo del Tribunal en materia de igualdad y no discriminación.
María Elósegui expuso cuatro casos de discriminación por cuestión de raza, mientras que Susana Sanz estableció la comparación entre las jurisprudencias del Tribunal Europeo de Derechos Humanos y el Tribunal de Justicia de la Unión Europea. Luis Jiménez repasó las sinergias entre el Tribunal Europeo de Derechos Humanos y el Comité Europeo de Derechos Sociales.
La mejor garantía de proteger los derechos es conocerlos, por lo que recomendaron, por encima de todo, formación. Y aunque están en instancia superior los tribunales europeos e internacionales, lo ideal es que se aplique la legislación a nivel nacional, ya que más del 90% de reclamaciones que llega a Estrasburgo, se inadmite.
La primera jornada de terminó con la presentación de las comunicaciones de Montserrat Gómez Mallén; Agata Serranò; Eva María Picado Valverde y Amaia Yurrebaso Macho; y de Nadia Solange Villafañe, Federico Ricardo Buckland y Daniel Amoedo Barreiro.
Alternativas jurídico-políticas al tratamiento de las violencias de género y nuevas masculinidades
La segunda jornada del Congreso Internacional de Derechos Humanos comenzó con la sesión sobre discriminación por razón de género impartida entre Juana María Gil, Catedrática de Filosofía del Derecho de la Universidad de Granada y Octavio Salazar, Catedrático de Derecho Constitucional de la Universidad de Córdoba.
Desde la aprobación de la Convención para la Eliminación de todas las formas de discriminación contra la mujer se ha avanzado mucho en esta materia, si bien es mucho lo que queda por alcanzar. Entre ambos presentaron el marco normativo vigente, el grado de eficacia que está teniendo, y los desafíos que se plantean a nivel social y cultural para conseguir la erradicación de esta forma de discriminación.
Tras esta presentación tuvo lugar la segunda sesión de presentación de comunicaciones, que corrieron a cargo de Alicia Cárdenas Cordón; Adán Carrizo González-Castell; Sebastián Ibarra González; y Celia Prados García.
De la discriminación racial y étnica a las nuevas formas de discriminación
A pesar de los avances realizados en materia de igualdad desde que se aprobara en el ámbito internacional la Convención para la Eliminación de la Discriminación Racial o Étnica, aún existe un porcentaje significativo de personas que experimentan discriminación, desigualdad y exclusión social basada en su origen étnico, el color de su piel, sus creencias religiosas o su orientación sexual. Para abordar este tipo de discriminación intervinieron Ignacio Sola, administrador Civil del Estado; Mar Fernández, Subdirectora General de Derechos LGTBI del Ministerio de Igualdad; y Ángeles Solanes, Catedrática de Filosofía del Derecho y Filosofía Política. Universitat de València.
Juntos presentaron reflexionar sobre las nuevas líneas de trabajo y las distintas iniciativas a través de las cuales es posible garantizar la diversidad cultural y construir un futuro con un tejido social más igualitario.
La (multi)discriminación por razón de la discapacidad
Ana Peláez intervino como Miembro del Comité de Derechos de las Personas con Discapacidad de las Naciones Unidas, pero, además, desde hace casi 20 años, dirige y asesora a gobiernos, a sociedad civil y a otras partes interesadas, para asegurar la plena inclusión de todas las mujeres y niñas con discapacidad en sus iniciativas y políticas desde un enfoque interseccional de derechos humanos. Compartió mesa junto a Antonio Luis Martínez-Pujalte, director de la Cátedra de Discapacidad y Empleabilidad TEMPE-APSA de la Universidad Miguel Hernández, quien desde hace cerca de 15 años dedica su línea de investigación principal al Derecho de la Discapacidad.
Presentados por el vicepresidente de Mainel, Germán Cerdá, en su sesión abordaron las principales formas de discriminación con las que urge luchar en el momento presente, y los marcos normativos e iniciativas presentes para ponerles fin.
Discriminación en tiempos de pandemias
En la última sesión del congreso intervinieron Federico de Montalvo, presidente del Comité de Bioética de España; Iñigo de Miguel, profesor Investigador Ikerbasque, Fundación Vasca para la Ciencia; y Marta Albert, profesora titular de Filosofía del Derecho de la Universidad Rey Juan Carlos.
Durante sus exposiciones identificaron las diversas formas de discriminación que se han manifestado tanto en el momento de contención de la pandemia por COVID-19, como en el de tratamiento de los afectados y de vigilancia para evitar nuevos brotes.
Libro de actas
El libro de actas del congreso recoge además los textos completos de las comunicaciones presentadas, y puede descargarse en la web del proyecto: https://derechoshumanos.mainel.org